
En el transcurso
El tiempo se ha echado como un perro moribundo
Nosotros, que fuimos estirpe,
Mañana no seremos más que sal y viento,
Briznas de una raza en partículas de arena
No contábamos con ello
Recorríamos la tierra, ilusos, esperando
Maravillas, pesadillas, redenciones
Por los países de cal entretejiendo
Las historias las canciones los imperios
Todo nudillos y gargantas
Librando batallas, recogiendo
Las migajas de dioses derrotados,
Espectros colosales escondidos
En las montañas del cielo.
Mendigábamos amor
Y éramos quebranto de llagas y esperanza.
3 comentarios:
Querida Lhy, me quedo sin palabras, sonrojado, quieto, mirando la pantalla. No puedo aceptar semejantes comparaciones, se me caería la cara de verguenza. Por otra parte, me encanta que disfrute lo que hago, porque eso me impulsa hacia adelante. Sepa que sus comentarios golpean más cerca de mi plexo solar que de mi ego, lo cual siempre es más saludable para todos.
Muchas gracias, De éste lado del mar.
Nos leemos, como siempre.
Ariel.
me alegra que tengas admiradoras, pero espero qu nunca olvides que soy la primera...
saludos mefistofelicos
Jamás, eso sería como arrancarme el pellejo y revolcarme en sal.
Un beso, el mismo beso, todos los besos.
(Pipi)
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